Tras el paso del verano nuestra piel ha sufrido mucho, por eso, para ir preparándola para el invierno, os proponemos aplicarle un exfoliante de azúcar y aceite de oliva.
Se trata de un exfoliante azúcar, miel y aceite de oliva, natural, que nos ayudará a limpiar nuestra piel con ingredientes que todo el mundo suele tener en sus cocinas.
El exfoliante casero azúcar y aceite de oliva, es una forma natural de limpiar la piel con suavidad y mimo.
Receta de exfoliante casero con azúcar, miel y aceite de oliva
Exfoliar la cara con azúcar y aceite de oliva puede sonar como algo raro, pero nada más lejos de la realidad.
Con un uso regular, este tipo de exfoliante natural, puede favorecer el aspecto radiante y suave de la piel.
Ya os hemos desvelado un poco los secretos sobre el aceite de oliva y azúcar para qué sirve. Ahora os enseñaremos a elaborar vuestro propio exfoliante de azúcar y aceite de oliva.
Ingredientes
3 cucharadas de AOVE
2 cucharadas de miel
½ taza de azúcar granulada
Para medir los ingredientes te aconsejamos que midas primero el aceite de oliva, y luego, utilizando la misma cuchar, hagas lo mismo con la miel, de esta forma, ésta se desprenderá con más facilidad.
Preparación
Necesitaremos un pequeño recipiente, con tapa, donde colocaremos todos los ingredientes.
Mezclamos todo hasta que consigamos una pasta blanda, con todos los ingredientes bien integrados.
Y ya tenemos nuestro exfoliante de azúcar y aceite de oliva.
Cómo aplicarlo
La exfoliación, es un proceso que nuestra piel hace de forma natural.
A través del mismo, la piel elimina las células “muertas”, esto es, las células dañadas que hay en ella.
Aun tratándose de un proceso natural, nosotros podemos acelerarlo, mejorando al mismo tiempo los resultados.
Para ello, debemos aplicar los productos idóneos de forma correcta, como es el caso de nuestro exfoliante.
Comenzamos a aplicarnos nuestro tratamiento
- En primer lugar, debemos limpiar bien nuestro rostro, quitando todo rastro de posible maquillaje.
- Con la cara húmeda, aplicaremos nuestro exfoliante casero en nuestro rostro, empezando por las mejillas. De ahí, iremos extendiéndolo hacia el resto de la cara.
- Realizamos un masaje frotando suavemente con las puntas de los dedos, con presión, pero sin apretar demasiado, dibujando pequeños círculos encima de tu piel.
- Realizaremos este masaje durante un minuto aproximadamente, abarcando toda la cara excepto alrededor de los ojos.
Puedes realizar esta exfoliación un par de veces por semana, si tu piel es normal. En el caso de tener la piel sensible, te recomendamos que lo hagas solo una vez cada 7 días.
Finalmente deciros que esta preparación puede durar en óptimas condiciones, más o menos durante un mes.
Eso sí, debéis guardarla en un lugar fresco y seco, si lo hacéis en el frigorífico se solidificará quedando inservible.
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